Mi vena polémica volverá a surgir esta vez.
Voy a exponer una teoría que hará que los lectores más ignorantes y fundamentalistas que no sepan leer entre líneas me tachen de machista, fascista o cualquier estupidez similar.
Se trata de la siguiente: una medida para reducir los malos tratos es reformar la injusta ley del divorcio que sufrimos.
Con una ley tan injusta como la actual se puede dar el caso de un hombre se quede con el culo al aire, sin casa, sin coche, sin ver a sus hijos porque su ex-mujer no respeta el régimen de visitas y encima manteniendo a una vaga que no trabaja porque no le sale del parrús.
Supongamos que en esa casa, que él puede estar pagando aún porque exista una hipoteca, la ex-mujer rehace su vida (cosa muy loable) y se instala un nuevo novio que hace de nuevo papá ante las criaturas. ¿No es motivo para que al ex-marido le hierba la sangre? ¿Cómo debe de ver que en la casa que está pagando, la mujer que lo ha echado meta a otro individuo?
Por supuesto, esto no justifica que al individuo en cuestión un día se le crucen los cables y cometa alguna gilipollez.
Pero una conveniente reforma haciendo más justa la situación podría evitar alguna tragedia que otra.
Así podría justificarse la existencia del Ministerio de la Igualdad, ¿no?
1saludo